Diariamente -sin exagerar- municipios del sur del Magdalena y Bolívar sufren cortes de energía.
En octubre de 2020, cuando la empresa Afinia entró a operar el servicio de luz en Bolívar, Cesar, Córdoba, Sucre y 11 municipios del Magdalena, la población se ilusionó con una eventual mejora en la prestación, dado el fracaso de Electricaribe como operador.
Sin embargo, las ilusiones de los usuarios no podían estar más lejos de la realidad, al menos en el caso de la mayoría de municipios de los sures del Magdalena y Bolívar.
Es apenas entendible que nada cambia de un momento a otro, que para todo debe haber una transición que implica, en el caso del servicio de energía, renovación de redes, instalación de postes, mantenimientos a los daños presentados, entre otros aspectos.
Pero, hoy, poco más de seis meses después de haber llegado Afinia a la región, la situación en nada ha mejorado.
Si tenemos en cuanto esta semana, por lo menos en el municipio de Guamal el servicio se ha ido lunes, martes, miércoles y jueves, tardando en llegar mínimo una hora después. La ‘guinda’ del pastel es que, justamente el domingo pasado, la población (y también El Banco, además del sur de Bolívar) estuvo sin luz todo el día por mantenimientos. ¿Y las facturas? Llegando puntuales y más elevadas.
Entonces, la comunidad se cuestiona y con justa razón: ¿de qué sirven los mantenimientos que tanto hacen, si al final nunca mejora la prestación?
El pésimo servicio de Afinia ya provocó que en plena pandemia algunas personas en El Banco elevaran su voz de protesta. Así pues, no sería raro que las poblaciones de los sures de Magdalena y Bolívar se fueran a las vías de hecho pidiendo pronta solución a tanto corte de energía.
El llamado, sin duda alguna, es a que Afinia de una vez por todas cumpla con los compromisos pactados y mejore la prestación del servicio de luz; sin dejar a un lado a las administraciones municipales, que deberían entablar serias mesas de diálogo con la compañía, antes que los pueblos se cansen y decidan manifestarse yéndose a protestas en las calles.
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